Historia
Nuestra historia
Villanueva del Pardillo fue en tiempos aldea de Galapagar, dentro de los territorios del Condado del Real del Manzanares del Ducado del Infantado. Formaba parte de un señorío y eclesiásticamente fue localidad perteneciente al arciprestazgo de Canales, del arzobispado de Toledo. Su fundación es anterior a la Peste Negra de mediados del siglo XIV porque es citado en el Libro de la Montería de Alfonso XI.
El Pardillo era un lugar cercano a Galapagar, villa de la que dependía en lo administrativo y en lo fiscal.
El 4 de noviembre de 1702 Villanueva del Pardillo adquirió el título de Villa. Antes de esa fecha nuestro pueblo se conocía como El Pardillo, y no tenía carácter de Villa. Bajo el reinado de Felipe V, se ofreció la posibilidad de que los lugares o pueblos que no tenían ese rango pudieran comprarlo. Los pardillanos de entonces, decidieron aceptar el precio que se imponía. Pagaron 687,5 ducados de vellón (moneda que circulaba en esa época) que equivalían a 257.812,5 maravedíes. Podríamos decir que hoy, 1 € equivaldría a 22.627 maravedíes, por lo que en euros la compra del título de villa serían 11,39€ de hoy.
El resultado de esta compra fue que la Reina Gobernadora, María de Neoburgo, en nombre de Felipe V, otorgó mediante documento público el caracter de Villa al lugar conocido por entonces como El Pardillo, pasando a llamarse Villanueva del Pardillo. A partir de la división en partidos judiciales en el siglo XIX, se integrará en el de Colmenar Viejo.
La historia de la localidad es un misterio en el lapso de tiempo que va desde finales del siglo XVIII hasta 1.939, porque en la Guerra Civil Española se destruyeron iglesia y ayuntamiento y, con ellos, los archivos correspondientes. Villanueva del Pardillo fue parte del frente de la Batalla de Brunete, quedando una sola casa en pie, conocida en el pueblo como “La Casona” (utilizada a día de hoy como centro cultural y biblioteca municipal).
Los planes de rehabilitación posteriores y el crecimiento inmobiliario en Madrid y sus alrededores han llevado al municipio a un importante crecimiento que se ha incrementado sobre todo en el siglo XXI.
Escudo y bandera
El 4 de noviembre de 1997, con el fin de dotar al municipio de sus señas de identidad, el Ayuntamiento presentó públicamente el escudo, la bandera y el himno de Villanueva del Pardillo.
En el escudo podemos observar en la esquina superior izquierda tres espigas de trigo de oro en hoz, fondo azul oscuro. En la parte inferior izquierda, fondo de plata con un racimo de uvas al natural.
En la parte derecha dos bandas verdes y una roja en souter y el texto Ave María Gratia Plena. Situada en la parte superior la Corona Real Española. La bandera se compone de fondo amarillo gualdo y el escudo en el centro.
Desde antaño, los escudos y banderas son los símbo los que aglutinan y sirven de identificación a un grupo humano.
Por eso su conservación o creación es muy importante para las comunidades municipales; por lo que su adopción y apoyado en el desarrollo histórico, ha determinado en la posesión de tales símbolos como elementos característicos de una determinada comunidad, ya que resaltan la propia peculiaridad de cada comunidad histórica y la identidad cultural que la diferencia de los pueblos limítrofes. Los escudos nobiliarios de las diversas ramas de los Mendoza aparecen como símbolo en muchos de nuestros municipios cercanos.
Fue el propio ayuntamiento el que decidió dicho escudo, se pretendía una representación del pueblo de tradición agrícola y la unión histórica de nuestro pueblo con los Duques del Infantado, todo ello coronado con la Corona Real Española. Así pues el blasón queda definido como:
Escudo parido en dos cuarteles o escudo medio cortado y partido. Primero A en campo de azur con tres espigas de trigo de oro en hoz, hace referencia al sector agrícola de la zona. Primero B de plata con un racimo de uvas al natural, hace referencia a que también fue una gran zona de viñedos. Segundo, Los Marqueses de Santillana, Duques del Infantado, Marqueses de Mondejar y de Cenete y Condes de Tendilla, traen; escudo cuartelado en sotuer: 1º. y 4º., de sinople, con la banda de oro cargada con la cotiza de gules; y 2º. y 3º., de oro, con la leyenda "Ave María Gratia Plena", en letras de azur.
Las dos primeras palabras en el cuartel segundo, y las otras dos, en el tercero, así fue como se les llamó "Los Mendoza del Ave María".
Al timbre. Corona Real Española, constituida por un cerco o cintillo de oro cubierto de perlas y piedras preciosas, realzado de ocho florones de forma de apio levantadas, entre las que se interponen ocho puntas más bajas rematadas en su punta por perlas, y apoyadas en los florones sendas diademas de oro cargadas de perlas y unidas al centro, ciadas de un globo centrado y cruzado de una cruz de oro.
Yacimiento arqueológico Los Palacios
El yacimiento arqueológico de época romana "Los Palacios" fue identificado en la Carta Arqueológica de la Comunidad de Madrid, elaborada en los años siguientes a la publicación de la Ley de Patrimonio Histórico 16/1985.
Los recientes proyectos de infraestructuras (Canal de Isabel II Gestión) posibilitaron la excavación parcial del yacimiento en el año 2013. Con esta presentación damos a conocer el valor y la importancia de estos restos arqueológicos excavados.
A finales del siglo I d. C. en el entorno del arroyo de Los Palacio se construyó una villa romana que perduró hasta finales del siglo IV d. C. La villa romana es un diseño constructivo desarrollado en el ámbito rural como un modelo de explotación agropecuaria, en el que además de ser la residencia de su propietario contaba con una serie de edificaciones destinadas a la transformación de los diferentes productos recolectadas en el entorno.
A esta parte productiva de la villa se denomina parsfructuaria y a ella pertenecen los edificios documentados durante la excavación arqueológica. Dentro de ésta, se ha podido identificar un edificio que albergaba la instalación completa de un lagar (torcularium) con todos sus espacios definidos: una sala de pisa y almacenamiento de la uva (calcatorium), una sala de prensado, una pileta de acumulación del mosto (lacus), y el contrapeso que hacía funcionar este ingenio.
El torcularium de Villanueva del Pardillo es, hasta el momento, el primer y único edificio documentado completo de estas características en la Comunidad de Madrid.
La arqueología además de recuperar restos antiguos tiene que interpretar las relaciones existentes entre ellos y el entorno en el que se produjeron. Los restos muebles nos señalan los hábitos alimenticios, higiénicos o el nivel técnico de producción, entre otros. Mientras que los restos inmuebles nos indican otros aspectos como la transformación del paisaje, la política, la economía, el urbanismo o el arte.
En definitiva, a través de la arqueología intentamos identificar y reconocer cada una de las culturas que se desarrollaron en nuestro territorio actual.
Rutas y sendas
Dehesa Boyal
Nuestro municipio cuenta con un entorno natural inigualable que se encuentra dentro de la comarca del Parque Regional del Curso Medio del del Río Guadarrama, este paraje denominado Dehesa Boyal. La masa forestal que compone este entorno supone un recurso natural de inestimable valor, siendo una zonas de especial protección dentro de la Comarca del Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama.
Parque regional del Guadarrama
El Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama y su Entorno es un espacio natural de gran diversidad ambiental que se extiende, desde la base de la sierra madrileña hasta la campiña de la depresión del Tajo, siguiendo el curso de los ríos Guadarrama y Aulencia.